Miércoles 20 de Marzo, 2013.
Miércoles 20 de Marzo, 2013
Hoy no fui a trabajar, fue día festivo y el descanso me cayó de perlas, así que me desperté muy tarde, pero como unas dos horas antes de levantarme tuve un sueño un poco extraño y que me gustaría escribir.
Fue uno de esos sueños que te sacan de onda porque son en ese lapso en el que estás entre dormida y despierta. Yo estaba recostada en mi cama, ya en ese proceso en que estás por dejar la cama, pero te quedas ahí un rato sin dormirte.
Todo en mi habitación estaba muy claro (pasaba ya del mediodía) y entonces veía a alguien pasar, pero yo cerraba los ojos para no verlo. Unos minutos después pasaba de regreso y se sentaba en un lado de mi cama, y no sé porque ahora si tenía yo el impulso de abrir los ojos para averiguar de quien se trataba.
Cuando lo hice dentro del sueño vi que era un muchacho. Tenía una apariencia agradable y amable. Él me daba las gracias de una manera muy cálida, pero yo no sabía cuál era la razón.
Yo le preguntaba al respecto, porque no entendía nada en lo absoluto, y él me decía que su agradecimiento era debido a todo lo que yo estaba haciendo. Al parecer él era un espíritu desencarnado y todas las veces que yo rezo o he escrito algo relacionado en el blog con ese tema, realmente es útil para ellos.
Aún después de su explicación yo seguía desconcertada y entonces él como en un intento por lograr que yo entendiera la magnitud de su agradecimiento se levantaba del espacio de mi cama donde estaba sentado, para luego acercarse a mi escritorio y con sólo posar sus dedos sobre mi diario yo sabía que estaba leyendo lo que en sus páginas estaba escrito y entonces él volteaba y me miraba con una gran sonrisa, como diciendo: ¿Ves todo lo que has hecho?...
Cuando eso sucedía yo simplemente le devolvía la sonrisa y le decía que eso era algo que yo siempre iba a tratar de hacer y no lo hacía con afán de recibir alguna recompensa o algo, es de hecho una costumbre que tengo siempre, rezar por la gente que justo en el último momento antes de yo irme a dormir, está naciendo, la que está dejando por alguna circunstancia el mundo, pero sobre todo por todos aquellos quienes mueren en condiciones violentas (accidentes, ejecuciones, guerras, etc).
Recuerdo que en algún momento, yo le preguntaba: ¿cuál era su nombre?, entonces él me respondía... Yo no le escuchaba a la primera así que le pedía que lo repitiera y hasta la segunda ocasión en que lo pronunció entendía lo que me dijo; y aunque era un nombre incoherente (que ahora no recuerdo), no sé porque me daba la impresión de que era lo primero que se le había ocurrido para no revelarme su verdadero nombre.
Yo seguía platicando con él (no recuerdo de que cosas), pero él se difuminaba en cuanto mi mamá entraba a mi habitación, después de haber regresado de la iglesia (que eso si sucedió en realidad, mientras yo dormía ella se había ido y regresó un rato después).
Me desperté y eso es todo lo que recuerdo ahora. Tal vez fue un sueño incoherente, tal vez una proyección de esa gran necesidad y búsqueda de lo espiritual que se ha ido acrecentando con los años.
No sé si lo soñé o de verdad lo vi, no sé si ese muchacho de verdad fue un espíritu de luz, pero me hizo sentir muy bien. No sé si pensar y escribir sobre todo eso de verdad ayude para quienes no están en este plano (en ese sentido yo siempre he creído mucho en la fuerza y energía que puede tener una oración sin importar tu credo o religión), pero lo que sí sé es que si él de verdad existe, me gustaría volver a verlo alguna otra vez.
Comments