Soraya y otra vuelta al calendario
Hace algo de tiempo que no escribo nada sobre ti, pero no se debe a que no te piense ni tampoco te recuerde... Contigo me pasa algo tan curioso, en el sentido de que aunque siempre te recuerde o haya momentos del día en que alguna canción en forma aleatoria o quizá cualquier detalle simple te traiga de regreso al presente, aunque no lo plasme en letras, se vuelve evidencia de que a pesar del paso de los años es como si todavía estuvieras entre nosotros.
La última vez que apareciste en uno de mis sueños no lo escribí, por ende perdí la noción de cuánto tiempo hace que fue eso. Lo único que recuerdo es que fue algo tan breve como incoherente, porque estábamos en el lobby de un hospital y tú eras parte del staff médico (así con uniforme de color azul como el que usan los especialistas en los centros hospitalarios); y yo te veía de espaldas y te reconocía. Aunque tú me sonreías a la distancia, lo raro dentro de ese espacio imaginario era que en cuanto intentaba acercarme para saludarte, te convertías en otra persona distinta., alguien que no conozco, pero si me quedaba de pie, sin intentar nada, de nuevo volvías a ser tú.
Eso para ti era divertido, y eso es todo lo que recuerdo ahora... Supongo que en mi intento por encontrarle sentido a un sueño tan incoherente la única justificación que le encontré fue el hecho de que en los meses recientes he pasado mucho tiempo viendo una serie muy famosa sobre médicos en un hospital. Fuera de eso no has vuelto a visitarme al cerrar los ojos en el mundo real; pero a pesar de que vivo con prisa y cargada de trabajo (cosa que agradezco); siempre es inevitable extrañarte cuando algún amigo comparte de pronto en un mensaje un video, o algún fragmento de una canción inédita que nunca formó parte de alguno de los discos que forman parte de tu discografía oficial.
Ese tipo de cosas, a mi en lo personal me hacen casi convencerme de que eres de carne y hueso de nueva cuenta... No tengo idea de si a otros de los fans les suceda, pero yo veo tus fotos, o escucho tu voz tan peculiar en algún video de cualquiera de las entrevistas que diste a los diferentes medios, y es eso lo que me lleva a comprobar que fuiste alguien que de verdad existió, y aún sin estar fue una parte muy importante para cada uno de nosotros...
No fuiste un sueño, no te imaginamos... De verdad fuiste una chava hermosísima (tanto por fuera como por dentro), y que tuvimos la suerte de conocer y escuchar de cerca; y no obstante que haya sido por un espacio de tiempo tan breve; fue justo la medida necesaria para darse cuenta de lo inmensamente afortunados que fuimos todos por haber recibido ese gran regalo.
El tiempo es algo tan relativo que puede intensificar o atenuar la manera en que se extraña a alguien que sólo está ya en las fotos o con fragmentos de su voz atrapadas en un disco compacto o escondida entre un montón de canciones de una playlist digital... Como sea, son esas pequeñas cosas las que sin importar la fecha, (o en que como hoy habrías cumplido 53 años); un día como cualquier otro se vuelva con cada vuelta al calendario, un motivo de celebración, más que de tristeza.
Sé que no soy la única, pero yo celebro el que hayas existido, el haberte conocido, las personas tan increíblemente especiales que trajiste a mi vida, lo que aprendí de ti, lo mucho que te admiré y todavía te admiro, que fuiste de las pocas personas que me han puesto nerviosa y las mejores entrevistas que me tocó realizar en mi vida como profesionista.
Pasan los años y sigo pensando que en un espacio y tiempo indeterminado, volveremos a verte, de la misma manera que lo haremos con Ingrid, esa gran amiga que en este plano terrenal no te conoció, pero que de seguro ahora donde quiera que tú y ella estén ya se conocen y son super amigas... Estoy súper segura de eso; así que en estas primeras horas del 11 de marzo, a la par de celebrar tu cumpleaños, me encanta imaginar que es ella la persona idónea para darte un abrazo en nombre de todos los que seguimos aquí pero a la par de extrañarte tanto, celebrar tu vida y tu legado aunque siga pasando el tiempo, es la mejor manera de conservar tu esencia y de alguna forma verte sonreír.
¡Feliz Cumple Sory!
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