Las Cápsulas del Tiempo más famosas de la historia.

"Nadie sabe lo que es el tiempo en realidad, pasa y pasa y no sabes hacia dónde te llevará"...

Así empieza una canción nueva de Ana Torroja que me encanta y que habla acerca de ese elemento en torno al cual gira nuestra vida, y con el que medimos el espacio en el que permanecemos aquí: "El Tiempo".

Quienes pasan seguido por este blog, saben de mi idea un tanto obsesiva por crear y conservar cosas que prevalezcan en el tiempo. He contando en el presente sobre cosas que me imagino como fueron en el pasado, he hablado de mensajes embotellados, del Proyecto KEO, del Arca de Noé del siglo XXI,  de la fascinación que me producen los viajes en el tiempo y los artefactos que se utilizan para ello en la historia de Caballo de Troya,  fuera del blog he escrito cartas personales sin tiempo, y en mi vida cotidiana, siempre que puedo trato de "atrapar" en el diario las imágenes y los momentos más especiales que voy encontrando a mi paso, todo con la intención de que no se pierdan en el olvido y en el futuro pueda conocerlos alguien más.

Dicen que el deseo de permanencia o de perpetuar las cosas en el tiempo, es un deseo que siempre hemos tenido los humanos... Yo no sé que tan cierto sea eso, tan sólo sé que desde siempre ese tipo de cosas me llamaron la atención.

La primera vez que yo escuché hablar de una "Cápsula del Tiempo" fue cuando era estudiante de comunicación. En mi infancia me parecían fascinantes las historias que mi abuela contaba acerca de tesoros y cajas con monedas de oro enterradas en los patios de las haciendas, pero nunca me imaginé que pudiera existir algo mucho más sofisticado como resguardar en un recipiente herméticamente cerrado y como una especie de envasado al vacío, un montón de objetos con la intención de darle a conocer a las generaciones futuras cómo era la vida en determinada época.

No recuerdo con exactitud que semestre era el que cursaba en la universidad, pero lo que si tengo presente, es que un día, al llegar a la escuela, nos encontramos con una convocatoria que invitaba a todos los alumnos, a contribuir con lo que quisieran para una Cápsula del Tiempo que se enterraría en alguna parte del campus, creo que de la ciudad de Chihuahua.

Yo nunca había oído hablar de algo semejante y aunque no tenía ni la menor idea de como era eso, creo que yo contribuí con un guión de radio que desconozco si todavía estará enterrado (la verdad tampoco estoy segura si iban a ser 50 años los que esa cápsula iba a permanecer cerrada y oculta); pues como les comento, lo más cercano que yo conocía a una cápsula de este tipo eran las historias que me compartía mi abuelita y un evento al que me tocó asistir una vez, en una empresa maquiladora, donde se puso la primera piedra de las instalaciones y en algún rincón se enterró una botella con el testimonio y las firmas de los primeros empleados de ese lugar (la maquiladora no tengo ya la menor idea ni de donde está, sólo sé que es por el rumbo de "Tierra Nueva")...

Pero bueno, volviendo al punto y sin importar si la famosa cápsula del tiempo de la universidad en donde yo estudié, sigue ahí, nunca la enterraron o la abrieron antes de tiempo; aprovechando esa curiosa atracción que siento por todas las cosas que se relacionan con robarle trocitos al tiempo, el post de esta mitad de semana es un recorrido muy interesante a través de algunas de las cápsulas del tiempo más famosas de la historia.

¿Me acompañan a echar un vistazo para ver que descubrimos? 

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La Cripta de la Civilización

Para empezar, cierra los ojos e imagina que estás en una habitación de 6 metros de largo, por 3 de ancho, en la que encuentras objetos como: 1 pájaro de plástico, 1 aire acondicionado, 1 tostadora de pan, 1 cenicero, 6 temas de Artie Shaw y su orquesta,  1 teléfono, 1 calculadora, 1 cámara de fotos, 1 pieza de jabón en forma de toro; la transcripción de un discurso del presidente Roosevelt, 1 trozo de papel aluminio, 1 aparato de radio de la marca Emerson; 1 vaso de cristal, 1 tostador de pan, 1 cámara kodak, ligas, abrelatas, un Martini seco con aceituna, 1 copia original del guión de la película "Lo que el viento se llevó", 800 microfilms con obras de la literatura como La Biblia, la Iliada, el Quijote, grabaciones de la voz de Roosevelt, Stalin, Hitler y Popeye el Marino; muestras de semillas de plantas,  1 máquina de escribir, 1 muñeco del Pato Donald, 1 cerveza Budweiser, etc, etc...

Seguramente con todos estos objetos que no tienen una conexión aparente entre sí, pensarías que estás en un "cuarto de tiliches" o de objetos en desuso, pero no, La Cripta de la Civilización es una especie de bóveda, cuya idea surgió en 1938, como una iniciativa del director de la Universidad de Oglethorpe en Atlanta, Estados Unidos y que resguarda en una habitación de concreto en el sótano de la universidad, una colección de objetos representativos de la época.

Fue sellada el 25 de Mayo de 1940 tras una puerta de acero, y se pretende abrir hasta el año 8113.
La Cripta de la Civilización será reabierta en el futuro por las autoridades que en ese entonces representen a los organismos gubernamentales y a la administración de La Universidad de Oglethorpe


Según el libro de records Guiness, esta es la primera cápsula del tiempo del mundo y cabe mencionar que los artículos más sensibles fueron sellados con receptáculos de acero inoxidable con guarniciones de cristal. Antes de que el contenido fuera sellado, todo el aire fue eliminado de los envases y sustituido por nitrógeno para prevenir la oxidación del contenido.

Proyecto KEO

Tal como lo comenté al inicio del post, ya hablé de este proyecto tan padre en un post de hace tiempo. KEO es la primera cápsula que orbita fuera de la tierra, y resguarda los mensajes de los habitantes actuales de la tierra. Circulará en el espacio por 50 mil años, hasta que la órbita del satélite vuelva a pasar por la tierra.

También lleva una gota de sangre humana elegida al azar, (encajonada en un diamante) y su nombre representa los 3 sonidos más frecuentemente usados en común entre los idiomas más extensamente hablados.

Conserva también muestras de agua, aire, tierra y mar, también DNA del genoma humano; así como un reloj astronómico, fotografías de la gente de todas las culturas y una enciclopedia que contiene el conocimiento humano actual.

Cápsulas del Tiempo Westinghouse

En este caso se trata de 2 cápsulas preparadas por Westing House Electric & Manufacturing Company. La primera fue creada para promover la feria mundial de Nueva York en 1939, y la segunda para el mismo evento, pero en 1964.

Medía 2.28 metros y pesaba 363 kg, y tenía un diámetro interior de 16 centímetros. En 1965 se enterró una segunda cápsula, a tan sólo 10 metros de distancia al norte de la original. Ambas cápsulas están enterradas a 16 metros por debajo del Parque Flushing Meadows.

La primera cápsula contenía objetos de uso cotidiano, como una bobina de hilo, una muñeca, un frasco de semillas, un microscopio. Varias bobinas de película condensaban contenidos de diccionarios, almanaques y otros textos, además de un noticiario con 15 minutos de duración. Ambas cápsulas serán abiertas el mismo año.

Cápsula de la Expo 1970.

En 1968, dos compañías japonesas: Panasonic Corporation y el periódico Mainichi,  emprendieron el proyecto conjunto de la Cápsula del tiempo para celebrar la exposición mundial de 1970 en Japón.

Dos cápsulas de tiempo idénticas en cada detalle, fueron enterradas en la zona adyacente del castillo de Osaka. La cápsula más baja seguirá enterrada por 50 mil años, pero una ya fue abierta en el año 2000 para examinar bien su contenido. Después de experimentar la prueba de laboratorio, fue enterrada de nuevo y será abierta cada 100 años para poder utilizar las últimas técnicas de preservación, para asegurar su conservación.

La cápsula tiene 2,090 artículos, los cuales fueron elegidos por un equipo de científicos, ingenieros, e historiadores que reflejaron la vida cotidiana en 1970, y así podemos encontrar: un condón de seda, dientes falsos, un ojo de cristal, insectos encajonados en recina, un libro de origami y dinero falsificado.

Centenarias columnas del tiempo de Helio.

En 1968 cuatro cápsulas del tiempo fueron selladas en Amarillo, Texas, las cuales conmemoraban el centenario del descubrimiento del helio. Las columnas del tiempo fueron llenadas con libros, documentos y varios artefactos que dirán a las futuras generaciones, cómo era la vida en 1968. 

Los casquillos se soldaron y el contenido fue sellado en una atmósfera de helio. la columna será abierta en períodos de 25, 50, 100, y 1000 años. En 1993, fue la primera vez que la columna fue abierta y significa la dependencia del hombre de recursos naturales. 

La cápsula de 50 años simboliza la industria y el uso de recursos naturales. 

La cápsula de 100 años representa la ciencia y el desarrollo de recursos naturales. 

La cápsula de 1.000 años representa la historia y los esfuerzos humanos hacia la conservación.
Dentro de la última cápsula se ha incluido una libreta de ahorros de un banco de Oklahoma, la cual se calcula que a un 4% de rendimiento anual contendrá, cuando sea abierta en 2968, la suma de US$ 1.000.000.000.000.000.

La Cápsula del Tiempo de Yahoo

La Cápsula del tiempo Yahoo! fue una idea original de un artista de prominencia en Internet, Jonathan Harris. Es un proyecto patrocinado por Yahoo! Inc., donde los usuarios pueden contribuir junto a Yahoo! para dejar un legado digital de cómo era la vida en el 2006. Las contribución de los usuarios estuvo abierta desde el 10 octubre hasta el 8 de noviembre del 2006, cuando iba a ser cerrada. Las esperanzas o ideas de sus creadores era la de capturar los sentimientos y pensamientos del mundo tal y como eran en esa época, con propósitos históricos.

La cápsula fue cerrada en el 8 de noviembre de 2006; después de esto la colección digital de esta cápsula fue entregada al Smithsonian Folkways Recordings, una rama de este famoso museo localizada en Washington D.C., y permanecerá sellada hasta el día que Yahoo! cumpla su 25 aniversario en el 2020.

Cápsula del Tiempo de John Lennon

Quise dejar para el final esta cápsula del tiempo, porque además de que me pareció un proyecto muy interesante, fue la nota que hace un par de meses me dio la idea para este post.

Hace apenas unos días se acaba de conmemorar lo que hubiera sido el cumpleaños No. 70 de uno de los personajes más representativos de la música del Siglo XX, y la idea es guardar las grabaciones realizadas por el líder del cuarteto de Liverpool, para que perduren hasta el 9 de octubre del año 2040.

Cuando se dio a conocer esta noticia, se exhortó a los fans para que enviaran cartas, deseos de cumpleaños y todo aquello que ellos consideren sea digno de que se conserve como fans.

La convocatoria se cerró el 8 de octubre en El Museo de La Fama del Rock and Roll en Ohio, Estados Unidos; y yo sigo a la expectativa de ¿qué sería lo que envió mi colega bloguer Tere Chacón? (quien como todos saben es una eminencia en temas Beatleros).

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¿Cómo ven?, ¿les pareció interesante todo esto?, espero que si. Después de conocer un poquito más sobre la existencia de estas cápsulas, varias preguntas se quedan en el aire y como siempre, las expongo al final de este escrito, por si alguno de ustedes desea compartirme su respuesta. ¿Cuáles serían las cosas que ustedes encapsularían? Yo creo que yo guardaría cosas importantes, libros, fotografías (no mías), sino que reflejaran momentos importantes de mi vida o la esencia de lugares especiales que en el futuro corren el riesgo de desaparecer, así como un montón de cartas (como las que estoy escribiendo en estas semanas), o escritos con historias de todo tipo que (así como intento hacerlo en el blog), en un futuro lejano, tal vez dentro de 100 ó 200 años, si todo eso sobrevive, pudiera llegar a manos de alguien que al leerlo se sintiera identificado o lograra aportarle algo al estremecerle el alma.

Por otro lado, si ustedes fueran un ser del futuro y les tocara por cosas del destino abrir una cápsula del tiempo, ¿qué cosas les gustaría encontrar ahí?... El tiempo y nuestra propia existencia son algo impermanente, pero este tipo de proyectos son una buena estrategia para engañar al destino y poder robarse trocitos de vida e historia para poder compartirlos a futuro con alguien... No sabemos quien, pero si se puede, ¿por qué no dejar algo que hable de nosotros mismos mucho más que una imagen o mil palabras?.

¡Buena mitad de semana!