Espíritu Imperfecto.


... De camino otra vez por la zona de la ciudad donde parece que el desierto cobra vida y el viento parece convertirse en la voz del silencio que te susurra tantas cosas al oído...

Una vez más tú ibas allí conmigo, acompañándome como siempre muy adentro de mis pensamientos, y mientras el sol comenzaba a quemarme la piel, mi mente se ausentó por completo, se fue detrás de ti, a miles de kilómetros de distancia, a un lugar que desconozco...

Mi alma se fue a buscarte (porque te necesitaba) y regresó sin encontrarte, pensando en la idea de que ya casi se cumple un ciclo más de tu ausencia, una ausencia que a veces se vuelve irónica, porque yo te hablo y converso contigo como si aún estuvieras aquí... Tu ausencia no es la única... Hay vacíos de todo tipo y en lo único que se parecen es en que todos duelen igual.

La arena sobre el asfalto distorsionaba también la visión de mi realidad, propiciando que el camino se volviera tan incierto como difuso... Creo que en este punto, mi vida está exactamente igual...

Quise cambiar el sentido de mis pensamientos, y ya casi cuando iba llegando al lugar hacia donde me dirigía, empecé a imaginar que para distraernos podría mostrarte todo lo que este día cargué en los bolsillos...

En ninguno de los dos había monedas ni billetes... Esos están últimamente muy escasos, pero llevaba un trocito de FE (al que me aferro siempre para que no se me acabe); unos cuantos sueños empolvados también por la arena del camino y que cuido tanto para que la realidad no los desmorone... 

La verdad es que a ti tampoco puedo mentirte, soy un ser humano como todos y por eso mi espíritu es tan imperfecto... Me imagino que a ti te pasó también muchas veces, que quisiste escribir para regalarle un trocito de esperanza a alguien, pero había días en que no podías ni contigo misma, y quizá, al igual que me pasó a mi hoy, te diste cuenta que la esperanza nadie te la regala... Aunque no sepas ni cómo, llevas todo en tu interior. porque tú mismo la tienes que crear.

Esa es la razón por la que en uno de los costados del bolsillo izquierdo, llevaba acumulada también demasiada nostalgia e incertidumbre, además de un amor tan grande y mucha ternura que hasta ahora son como esas cosas inútiles que uno a veces guarda...

¿Te confieso algo?... Hay días en que me dan ganas de sacar todo eso y tirarlo en el camino, para que se evapore con el calor del desierto, o no sé si será mejor guardarlo en una caja adentro del armario, por si algún día quizá a alguien le puede servir...

Creo que cada uno de nosotros viaja todos los días con distintas cosas adentro de los bolsillos... Hay algunas personas que llevan cosas hermosas y luminosas, otros cargan sólo lo del día y hay otros que llevan toda su vida con los mismos demonios y sentimientos resguardados en la mezclilla de sus jeans...

La pregunta al final del día fue: ¿qué harías tú si estuvieras en mi lugar?... Pero creo que hoy tú tampoco tenías muchas ganas de responderme... Pienso que si de verdad hubieras estado aquí te habrías limitado a sonreírme para luego decir: "ya no pienses tanto, y tan sólo enfócate a vivir más"...

Hoy esto es lo que cargué yo en los bolsillos, pero es seguro que eso no va ser para siempre y en algún momento (no sé cuando), eso puede cambiar...

Ya mañana será otro día... ¡Buenas Noches!

Comments

Sergio said…
Ay Dios Martha, ¿qué te puedo decir? Ante la descripción que haces, sólo una cosa, ¡nunca pierdas la fe! Sin ella todos nos perdemos, lo demás, tristezas, nostalgias y sentimientos de soledad, pasarán con el tiempo.

Ya verás que vendrán tiempos mejores, al menos eso es lo que le pido a Dios por ti y por mi país.

Un abrazo con amor
ѕocιaѕ said…
Guardar un poquito de Fe está muy bien, las personas no siempre van a poder ponerse en nuestro lugar o decir algo que nos haga sentir mejor, por eso cargamos tantas cosas, todo eso nos ayuda a crecer, a aprende a comprender =)
Mañana será otro día
Ánimo

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