Te Nombré en el Silencio

Salen desde temprano a buscar "tesoros" en el desierto... Sin importar el calor, la maleza o lo accidentado del terreno, equipadas con sus palas y sus herramientas hechizas, hurgan hasta con sus propias manos cada centímetro del desierto en busca de sus hijos desaparecidos.

"Las Rastreadoras de El Fuerte", así es como las llaman, y son un grupo de alrededor de 29 mujeres, madres de familia, unidas por un objetivo en común: "encontrar a sus hijos", quienes en distintas circunstancias han sido víctimas de desapariciones forzadas en México.

Esta historia, desafortunadamente es demasiado común en México, más de 80 mil personas han desaparecido desde que se recrudeció la guerra contra el narco, y al igual que otros colectivos que existen a lo largo de toda la república mexicana, la de este en particular surgió cuando Mirna Medina perdió a su hijo Roberto, quien trabajaba en una gasolinera y ante la nula respuesta de las autoridades para ayudarla a localizarlo, ella tomó la decisión de salir a buscarlo vivo o muerto.

Su tenacidad y fortaleza como madre fue la que lo llevó a encontrarlo. Desafortunadamente no fue con vida ni tampoco su cuerpo completo. Su trabajo no terminó ahí y se unió a otras mujeres para ayudarlas a buscar a sus familiares y en ese proceso, a la par de empezar a aprender como idear sus propios sistemas de búsqueda en orografía difícil, ella se dio cuenta como antes de la desaparición de su hijo, era una mujer que vivía en una especie de burbuja en la que la violencia y las noticias sobre crímenes violentos eran algo muy lejano a su existencia.

A 8 años de distancia, dos veces por semana, Mirna recorre el desierto y las áreas despobladas donde alguien les avisa que hay algún vehículo quemado o alguna fosa clandestina donde podría haber cuerpos. Sin importar el sol inclemente y el calor abrasador, recorre cada espacio observando detenidamente, mientras otras de sus compañeras retiran maleza, escarban y huelen la tierra en busca de restos humanos.

Hasta octubre del 2020, "Las Rastreadoras" habían encontrado ya 208 cuerpos... Aunque Mirna logró recuperar una parte de los huesos de su hijo, a la par de brindar apoyo y consolar a las mujeres que salen a buscar con ella, sigue regresando al área donde hoy hay una cruz que marca el sitio donde fue el hallazgo, con la esperanza de encontrar el cuerpo completo.

Los días en que no hay búsqueda en campo abierto, Mirna atiende en una pequeña oficina a personas que también buscan a sus hijos, toma los datos y a la par de brindarles unas palabras de consuelo, hace el compromiso de realizar todo lo que esté a su alcance para ayudarlos a encontrar a su familiar desaparecido.... Al ser ella una mujer que ha vivido en carne propia ese dolor, sabe que ni la fiscalía ni alguna otra autoridad estatal, municipal o federal buscaría con la misma intensidad que su grupo de "Rastreadoras".

Para cada una de las mujeres que forman parte de este colectivo, hay días del mes que pesan mucho más que otros... Sobre todo los que marcan un antes y un después en sus vidas desde que sus hijos dejaron de ser vistos, pero es irónicamente y como algunas de ellas cuentan, lo que les da fuerza extrahumana para no sentir las quemaduras del sol ni el cansancio cada vez que están buscando fosas o indicios de cuerpos en los terrenos pedregosos y desérticos.

Las desapariciones forzadas de personas son un tema escabroso y una espina gigante en el zapato de las autoridades que en este documental se ven expuestas como lo ineficientes que son, porque no es posible que sea un grupo de madres de familia quienes sean las encargadas de buscar y rescatar los restos de decenas de personas prácticamente para que la fiscalía llegue nada más, las levante y las analice en algún laboratorio forense... Muchas veces sin ni siquiera tomarse la molestia de realizar un peritaje más completo y detallado de las zonas donde se dan estos hallazgos... 

Mirna y sus "Rastreadoras" son incansables y de la misma forma que son capaces de compartir los alimentos y el agua en los sitios de búsqueda, sin conocimientos y basándose en su propia experiencia realizan un mejor trabajo que los peritos forenses y también van a la ciudad de México para apoyar a otros grupos y unir fuerzas con la intención de que el gobierno deje de darles excusas y se ocupe por fin de ayudarlas.

Como ellas dicen, "Nosotras no buscamos culpables, buscamos tesoros", y aunque sí, es un hecho que viven con miedo de que tal como ha sucedido con otras mujeres que encabezaron movimientos en busca de justicia (Marisela Escobedo, por ejemplo), algún día sean los mismos narcos o grupos poderosos quienes con tal de evitar que sigan encontrando cuerpos tomen represalías contra ellas. Eso las atemoriza, más no amedrenta su espíritu y en esa hermandad que han creado le brindan su apoyo a todo aquel que se acerque a pedir ayuda con algún familiar desaparecido.

"Te Nombré en el Silencio" es un documental impactante que expone de una manera realista una de las muchas aristas, y de las más dolorosas del cáncer de la corrupción que impera en nuestro país y que del mismo modo, logra de una manera muy sensible, darle voz y rostro a cada una de estas mujeres que a la par de buscar con uñas y dientes a sus hijos, son madres de familia, amas de casa y seres humanos que tienen que seguir viviendo con este dolor latente de no saber si sus hijos están vivos o muertos. 

El documental es parte del festival "Rastros y Luces" y puede ser visto por tiempo muy limitado de forma gratuita a través de la plataforma digital de Cinépolis Klick.

Sobre el director: 

José María Espinosa (México, 1989) es fundador de Cinema del Norte, una productora independiente que busca descentralizar y promover la producción cinematográfica en el norte de México. Debutó como guionista y director con el cortometraje Whippet, el cual participó en festivales como el GIFF, Miami Film Festival, Black Canvas FCC y el Festival del Puerto. José X, su segundo cortometraje como director, fue parte de Macabro y Mórbido Film Fest.

"Hay algo que te voy a decir, que quede bien claro y siempre lo he dicho. Nosotras estamos buscando a nuestros tesoros, y si un día llega el diablo y nos dice: "Aquí está tu tesoro", cada una de las rastreadoras se va agarrar de la cola o de la mano del diablo y se va ir con el a buscar ese tesoro".

-Mirna Medina (Fundadora de "Las Rastreadoras del Fuerte")-