Último Post del 2021.

                                        

No iba a publicar nada el día de hoy, pero cuando iba de camino al trabajo en medio de un día bastante lluvioso, frío y con niebla, me cayó el 20 de que gracias a Dios terminé una vez más el año cargada de trabajo. 

Estas últimas semanas se me han hecho muy pesadas. Compaginar 2 trabajos es bastante cansado, y aunque ayer tuve servicio doble del pequeño negocio de limpieza, no me quejo porque trabajar hasta en los días festivos ha sido una manera de apoyar a algunos clientes muy especiales que confiaron en mi cuando no tenía trabajo y la idea de emprendimiento aún no era conocida por nadie. 

Ya pasaron poco más de 2 años y algunos de esos clientes se han vuelto personas a quienes aprecio y respeto bastante. Por esa razón quise escribir que me siento enormemente agradecida porque en medio de estos tiempos tan adversos,  coincidí con personas que me han permitido crear un servicio que ha sido mi fuente de empleo perfecto en una época difícil  en que muchas personas han perdido el suyo. 

Me siento muy bendecida por eso, porque mi familia está bien y mis padres están aún con nosotros y sanos. Hay una sola cosa que me duele a nivel personal, es una ausencia de un año y meses, pero es algo que aunque yo quisiera, implica la decisión tajante de alguien más y que yo debo respetar. 

Todos los días pienso y en mis oraciones hablo al respecto y supongo que el tiempo y el plan de Dios están mucho más allá de mi entendimiento; así que no queda otra opción más que confiar y avanzar. 

Me encanta una frase que le escuché una vez a una persona que admiro mucho, y que hace referencia al hecho de que la Fe es confiar en los días soleados que aún no hemos vivido, así que aunque no sabemos lo que traerá el 2022, hay que agradecer por lo que si hay en este presente y trabajar duro para estar lo mejor posible aunque las circunstancias vayan cambiando. 

Si algo nos ha enseñado el 2019, 20 y 21 es que hay que adaptarse a los cambios y por lo que veo eso es ya una premisa de vida... 

De verdad espero que así sea para cada uno de ustedes y que todos los aprendizajes que están en el 2022 y les toque vivir sucedan de la manera más amorosa posible. 

Gracias de corazón por seguirme leyendo, por el tiempo que me regalan cada vez que pasan por aquí, porque esto es algo que me encanta hacer, que disfruto igual que el primer día que publiqué, y que si Dios lo permite, aunque en el presente lleve esta vida tan ajetreada, seguiré buscando el tiempo para publicar. 

Gracias por este año que se nos ha permitido terminar sanos y con familia, y que el 2022 sea un mejor año, lleno de salud y bendiciones para cada uno de nosotros.


Oración de Final y Principio de Año

Al terminar este año, Señor, quiero darte las gracias por todo lo que he vivido.

Gracias por los días de sol y los nublados tristes, por las tardes tranquilas y por las noches oscuras.

Gracias por la soledad, por el trabajo,  por las dificultades y por las inquietudes,  gracias por todo lo que me acercó más a ti.

Pronto iniciaremos un nuevo año y detengo mi vida frente al calendario aún sin estrenar.

Te pido fe, para mirarte en todo, esperanza para no desfallecer y caridad para amarte cada día más, y hacerte amar de los que me rodean.

Suplico que derrames sobre el mundo, la paz y la alegría.

La fortaleza y la prudencia.

La claridad y la sabiduría.

Para el año nuevo venga a nosotros tu reino Señor. 

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