"Mi Planta de Naranja-Lima"

Título:"Mi Planta de Naranja-Lima"

Autor: José Mauro de Vasconcelos

Editorial: El Ateneo

Es la primera vez en mucho tiempo que me toca leer un libro sin haberlo elegido yo...

"Mi Planta de Naranja-Lima" fue un regalo muy especial que me dio Vane en Febrero de este año (para mi cumpleaños) y aunque como lo mencioné ya, yo no lo elegí, si tenía mucha curiosidad por leerlo, debido a que fue tanto lo que ella me hablaba y me hablaba del mismo, que logró despertar mi curiosidad y yo quería averiguar exactamente ¿Qué había de especial en ese libro que propiciaba que ella se apasionara tanto?

La historia es muy simple, trata sobre un niño de 5 años que se llama "Zezé", quien es uno de los hijos más pequeños de una familia pobre que vive en los suburbios de Brasil.

A pesar de las carencias, debido a la inocencia que caracteriza a los niños de esa edad, "Zezé" vive en un mundo muy peculiar de fantasía, donde las aventuras de las series del Oeste, los escritores con "Corbata de Moño", su afición por aprender palabras nuevas y raras; así como su anhelado sueño de recibir un regalo el día del nacimiento del "Niño Dios", forman parte de sus sueños y aspiraciones.

Lo primero que llama la atención de esta historia, es como desde un principio, "Zezé", dentro de su mundo de inocencia, comienza a darse cuenta de la dura realidad que lo rodea. Sus primeros recuerdos infantiles evocan las canciones que a muy corta edad comienza oirle cantar a su madre, mientras ella lava ropa para ayudar con los gastos de la casa y a partir de ahí -así lo interpreto yo- este niño comienza a desarrollar una especie de "mecanismo de defensa" que consiste en "Cantar Por Dentro", tal y como si tuviera un "Pajarito por dentro" (como él mismo lo llama), y al que recurre cada vez que se siente triste o solo.

Al comienzo de la historia, "Zezé" describe como es su mundo. Sus días transcurren entre las cosas "audaces" que le enseña su hermano "Totoca": Como aprender a cruzar una carretera; pelearse a golpes con otro niño en su lugar, o viajar de "polizón" colgado de los autos y bajar rápido sin lastimarse; las conversaciones e interrogantes llenas de precocidad con "El Tío Edmundo" (un hombre adulto ya jubilado); y el gran amor y cuidado que profesa por "El Rey Luis" (un niño aún más pequeño que él y que también es su hermanito), las travesuras que lo hacen pensar que es un "Niño-Diablo" y que lo llevan a ganarse en más de una ocasión una buena paliza correctiva, varias de ellas muy crueles e injustas y de las cuales su hermana "Gloria" (Godóia, como la llama él), es la única que lo defiende.

Mientras nos vamos adentrando en la vida de "Zezé", las circunstancias tan adversas de su familia lo llevan a mudarse a una nueva casa en donde cada uno de sus hermanos elige del jardín un árbol. "Zezé", por ser uno de los integrantes más pequeños de la familia, sale poco beneficiado con "la repartición" y le toca una "Planta de Naranja-Lima" que apenas es una rama y a la cual no se le ve un futuro tan prometedor como los de los otros árboles designados para sus hermanos.

Al principio "Zezé" no parece muy entusiasmado con la idea, pero con el tiempo y conforme el arbolito comienza a crecer, este niño tan especial comienza a desarrollar una relación muy sólida en la que "Minguito" -como decide llamarlo- se comunica con él también y ese es el comienzo de una relación muy sólida que lo lleva a hacer del árbol su mejor amigo y confidente.

Aunque en apariencia, pareciera una historia muy simple, casi, casi como un libro que en un principio parece que fue diseñado como "primera lectura" para niños y jóvenes; conforme vas avanzando en los capítulos, te das cuenta que no es así, porque a pesar de las sencillez de los diálogos, la cotidianidad de las aventuras de "Zezé" se van tornando cada vez más complejas y fuertes.

La parte que más "te mueve" como lector y de la que aprendes empieza donde "Zezé" toma conciencia de que dadas las circunstancias nunca recibirá un regalo de Navidad y eso provoca un incidente muy triste relacionado con su papá, y es entonces cuando "Zezé" decidido a hacer algo para ayudar a su familia, comienza a ganarse la vida lustrando zapatos y luego ayudando a "Don Ariovaldo", un vendedor de folletos tipo cancionero de tangos argentinos, y también otro momento climático del libro es cuando a través de una gran lección de vida, relata como se puede llegar a querer tanto a la persona que más se odia y en su caso está representada por: Manuel Valadares, "El Pórtuga".

En lo personal me pareció un libro muy, muy triste... Por lo que estuve leyendo, al parecer es una historia que le pasó al autor: José Mauro de Vasconcelos (†), y ya cuando llegué a la parte final, me quedé con el corazón "apachurrado"... Eso fue la semana pasada, a bordo del camión cuando estábamos a punto de salir a carretera, y al cerrar el libro me dieron muchas ganas de llorar... (Sí, ya sé: "que cursi", pero lo siento, tengo corazón de pollo).

Lo que me gustó fue como el autor, a través de diálogos tan sencillos expresa sentimientos tan reales y auténticos, que te llevan a recordar y sentir un poco de nostalgia por esa inocencia que alguna vez todos tuvimos y al crecer inevitablemente se pierde.

Me encantó también que trata la historia sobre varios "Árboles" (La de "La Reina Carlota" es buenísima), y en particular la analogía que da final al libro, entre "La Planta de Naranja-Lima" y la inocencia de "Zezé".

Respecto al protagonista, me encantó que es un niño muy, muy especial -la verdad dudo mucho que en la actualidad exista un niño así-, pero con este libro aprendí que si puede haber "niños grandes", y en ese sentido, Vane tiene muchísimo del personaje principal y me fascinó descubrir eso al leerlo.

Me gustó también que a pesar de ser una historia sencilla, no es para nada predecible, ya que la forma tan peculiar de ver la vida que tiene este niño, revela como va madurando a base de lecciones demasiado fuertes y realistas y como dentro de su mundo de fantasía, él toma conciencia de que su inocencia poco a poco se va quedando atrás y esa parte dentro del libro te impacta y te estremece por dentro, porque la verdad es muy fuerte.

Hace poco, me tocó realizar para la sección de libros de FB!, una reseña de los títulos y autores que son imprescindibles para conformar "La Biblioteca Perfecta" y me sorprendió mucho descubrir que varios expertos en el tema, coinciden en que "Mi Planta de Naranja-Lima" está catalogado dentro de su género como uno de los libros que no puedes dejar de leer... Y la verdad creo que sí, es un libro muy hermoso, pero aún así no puedo dejar de advertirte que si llega a caer en tus manos, te recomendaría que tuvieras tu cajita de Kleenex al lado, porque a pesar de que es un libro muy emotivo del que aprendes muchísimo, de modo inevitable te va a estrujar el corazón...

Después de leer "Mi Planta de Naranja-Lima" me quedé pensando mucho en el montón de charlas que Vane y yo hemos tenido sobre este libro (mucho antes de yo haberlo leído), y al hacer ella referencia a que es "El Libro de Su Vida", me puse a reflexionar si invariablemente todos tenemos un libro que nos haya marcado al grado de definirlo así...

Esa es una cuestión que desde entonces me ha dado vueltas en la cabeza, y aunque de todos los libros que he leído (y que son menos de los yo quisiera), me di cuenta que no tengo predilección por ninguno en particular, pero si tuviea que elegir uno, definitivamente sería: "Dios Vuelve en Una Harley" (I y II), yo creo que porque me gustaría que me pasara algo así como a la chava de esa historia... ¡Pero en fin!... Esos son sólo pensamientos en voz alta, y por ende: tema para otro post.

P.D. Si alguien se interesa en leerlo, sólo escríbame un recadito en el Cbox o envíenme un e-mail y con todo gusto se lo hago llegar a su buzón de correo electrónico en formato PDF.

¡Gracias Vane, por compartirme el libro de tu vida!!!

... Ahora sí, más adelante les platico del libro de Fernanda Familiar -que ya lo terminé de leer- y mientras, nos adentramos de lleno en las aventuras del México Prehispánico con "Isabel Moctezuma" y también volveremos otra vez con "El Mayor" y su inseparable amigo "Eliseo", para acompañarlos en ese "tercer salto" hasta La Galilea del año 30, para descubrir todo lo que sucedió durante los años ocultos de la vida de Jesús de Nazareth.