Colibrí (Leyenda Maya)

Cuenta la leyenda que los dioses crearon todas las cosas de la tierra. El mar y el cielo. Cada planta, cada animal y cada piedra. 

A todo y a todos les encargaron un trabajo, pero cuando terminaron, notaron que no tenían mensajeros que llevaran los deseos y los pensamientos de un lugar a otro. Como ya no tenían barro ni maíz para hacer otro animal, tomaron entonces una piedra hermosa de jade y le soplaron con su aliento; así crearon al "x ts’unu’um", hoy, conocido como Colibrí.

Esta ave, era tan especial y tan lleno de amor que era capaz de acercarse a las flores más hermosas y tocarlas sin dañarlas, y era tan bonito que reflejaba todas las emociones de sus mensajes a través de su plumaje.

Nadie tenía derecho a tenerlo amarrado, pues fue hecho para vivir en total libertad. Por eso, se dice que nunca verás a un Colibrí en cautiverio, porque es libre y siempre lo será. Si por alguna razón llegasen a capturarlo, se marchitará y morirá.

Desde entonces, el trabajo de un hermoso Colibrí es llevar los deseos y los pensamientos de los hombres.

Si ves a un Colibrí pasar muy rápido, es que lleva un mensaje. Si lo ves cerca, es que tiene un mensaje de amor para ti, para tu corazón. Y si te vuela por alrededor o por encima, está capturando tus pensamientos para llevarlos a quien tu desees.

El Colibrí no es visto por todo mundo, y pueden pasar años sin que aparezcan, pero siempre llegarán si tienen una misión que cumplir.