Algo para reflexionar....
He andado muy desaparecida porque no ha habido nada nuevo o interesante para contar, pero en este ratito libre antes de ir a trabajar quise romper un poco el silencio literario para compartir algo en lo que he estado pensando durante un par de días seguidos.
No recuerdo si ya lo había comentado, pero en este tiempo reciente, en mi escaso tiempo libre me gusta mucho ver entrevistas. Como buena comunicóloga, y pensándolo bien, desde niña he amado la comunicación en todas sus formas y por eso mi fascinación por las personas que tienen el don de conversar y llegar a través del lenguaje y los cuestionamientos hasta la esencia más pura de cualquier persona normal o celebridad, lo que nos permite conocer o tener una fotografía más nítida de ese alguien, empatizar o si por alguna razón nuestros prejuicios y creencias no nos permiten hacerlo, por lo menos entender los motivos o razones de su comportamiento o decisiones determinantes para su vida.
Esto último es tema para conversar en otro escrito, pero tenía que plantearlo así porque fue precisamente en una de esas tantas entrevistas que veo, más en específico en el canal de un entrevistador que ya conocía, pero apenas hasta hace muy poco descubrí más a detalle su trabajo (y me ha encantado); justo sin que fuera el tema central de esa entrevista él argumentaba esto que hoy comparto y es justo lo que al principio dije yo, me ha estado dando vuelta a la cabeza en estas horas recientes.
Yo no lo había visto así, pero este gran conversador le decía a uno de sus invitados que cuando somos niños mostramos sin quererlo lo que será nuestra misión de vida o la vocación que tendremos ya en la vida adulta. Él decía que eso se debe a que durante nuestros primeros años de vida estamos conectados con"Nuestra esencia más pura" y por eso jugamos a lo que queremos ser de grandes.
La verdad tiene mucho sentido... Si hago memoria en el montón de entrevistas que he visto desde siempre en la tele, en la radio, y ahora hasta en el cine, especialmente en las "biopics" o películas biográficas, los grandes cantantes o personajes de la historia jugaban a que eran artistas, conquistaban la luna o realizaban grandes descubrimientos que de alguna manera cambiaban el rumbo de la historia de la humanidad (algunos para bien y otros para mal), pero eso también ya es otro tema.
Aterrizándolo más hacia quienes somos personas más comúnes y normales, cuando esta persona dijo eso, inmediatamente me hizo click y me vino a la mente todo lo que yo jugaba desde que tenía 5 años.
Tengo muy claro mi salón de clases en primero o segundo año de primaria, que yo ya había terminado de leer todo el libro de "lecturas de comprensión", porque me fascinaba imaginarme las historias que iban desde la mitología griega hasta las fábulas más clásicas, así como también empezaba a escribir en solitario en la parte final de mis cuadernos de cualquier materia, todo lo que se me ocurría o si había ido al cine a ver alguna película que me volara todavía más la imaginación (Como la película de "El Vuelo del Navegante", "E.T.", o la legendaria "Historia sin Fin"), creo que hace años hablé de eso en el blog, no me acuerdo.... Y si sólo lo imaginé y no lo he hecho, sería un buen tema acerca del cual escribir.
El caso es que yo jugaba a todo eso, y ya en compañía de mis hermanos, cuando descubrí las radiograbadoras de cassette fue lo máximo para mi y mi mayor felicidad era jugar a crear radionovelas y entrevistas (me da risa ahora); siempre me quise dedicar a eso o ser veterinaria, pero de alguna manera terminé estudiando comunicación y trabajando en una agencia de publicidad que me permitió practicar todo eso.
Pienso también en mi hermano menor, quien desde que tenía 3 ó 4 años desarmaba los carritos de juguete que le regalaban, especialmente los de mecanismo de fricción, para ver como funcionaban. Había uno de esos simples de plástico, al que se le salía una rueda porque -quizá el ni siquiera lo recuerda- pero era de color amarillo y quedó así desde una vez que estaba jugando a que desponchaba el neumático y reparaba la pieza donde se incrusta.... Corte a: En la actualidad es mecánico, y me parece que su hijo menor va por el mismo camino...
Hace algunos años yo ya había leído en uno de los libros de Tania Karam que "La Misión de Vida" se ve reflejada desde los 3 años, y eso tiene mucho de cierto. En la actualidad lo he visto de manera muy concreta en algunos de mis sobrinos. Hay uno en especial que desde bebé, tenía comportamientos como muy conscientes para alguien de esa edad, era muy visual y en la actualidad es ya un adulto, pero desde muy temprana edad dibuja y modela figuras de manera increíble.
Hasta este punto del post, estoy segura que cada uno de ustedes ya estará recordando ¿a qué jugaban cuando eran niños?, y créanme, aunque las circunstancias en la vida adulta muchas veces son adversas y pareciera que alguien no se dedica para lo que fue llamado, de alguna manera siempre pone en práctica lo que es su vocación.
Esa es precisamente la reflexión principal de este escrito, así como la importancia de apoyar a los chavos y niños que están a nuestro alrededor.
Nosotros de alguna manera fuimos privilegiados porque recibimos una educación distinta, con más valores, el mundo no era tan hostil ni competitivo y por eso considero que es importante enseñarlos a discernir, pero sobre todo a buscar su verdadera vocación en base a las herramientas que ellos ya traen y por ende dedicarse a lo que realmente les apasiona, más que ser profesionistas que se inclinen a estudiar una carrera en base a lo que más deja dinero. Una cosa no está peleada con la otra, pero si es verdad, desde niños mostramos lo que seremos en el futuro.... Quienes somos adultos en la actualidad no olvidemos eso y tengámoslo presente no sólo con nuestros niños cercanos, sino también con las generaciones jóvenes con quienes nos toque coincidir.
Espero que todos ustedes, quienes me leen, sigan jugando el día de hoy a lo que querían ser de grandes.
¡Nos leemos pronto!
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