Reflexión sobre la película "Reminiscencia"
Siempre que una película me gusta o me deja pensando mucho me gusta escribir al respecto. En esta ocasión no haré eso, primero porque fue una cinta que vi hace ya un par de meses, y aunque desde entonces me dejó pensando mucho, tenía ganas de hacer algo diferente y en lugar de contar de que va la trama, quiero enfocarme en que hoy, hace exactamente una semana, pude comentarla por fin con alguien de una manera padrísima y esa es la razón por la que decidí dedicarle este post.
Para nadie es un misterio que todas las historias que llevan a Hugh Jackman como protagonista son muy buenas. En ese sentido "Reminiscencia", no es la excepción. Desde que me enteré que estaba próxima a estrenarse tuve bastantes expectativas que fueron superadas por el simple hecho de que sin entrar mucho en detalles (porque el trailer es mucho más descriptivo), esta película incluye dos de los elementos que me encantan en el cine: viajes en el tiempo y atmósfera futurista.
Aunque esa es una combinación fascinante en la pantalla grande, debo confesar que mi deseo en realidad es escribir sobre una pregunta que se quedó rondando en mi mente después de conocer como es la vida de "Nick" (el personaje que interpreta Hugh), y todas las cosas que le suceden en una famosa ciudad inundada y futurista.
A lo que quiero llegar sin spoilers es al hecho de que la historia de amor de este personaje trajo a mi mente una pregunta que desde siempre yo he planteado en distintos escritos dentro de las "Páginas Sueltas y de Colores", y que tiene que ver con la duda de si: ¿El amor nace o se construye?
A través de los años, tanto lectores como amigos cercanos me han dado su punto de vista al respecto sobre esta pregunta... En lo personal y conforme a las cosas que he vivido, en este momento cronológico de mi vida estoy cada vez más convencida de que el amor es algo que se construye, es una decisión de dos personas que aún con defectos, intentan complementarse y ser felices a pesar de las dificultades de la vida diaria... Aunque parecería que me estoy alejando del tema, "Reminiscencia" tiene mucho que ver con eso y con esa delgada línea que existe entre el amor y la obsesión.
No sé si ustedes que me leen ya la vieron... Si es así o no la han visto aún, y después de este escrito les da curiosidad verla, cuando lo hagan ojalá coincidan conmigo en que dentro de esta historia en particular, el personaje de Nick cruza esa frontera y lo que en apariencia es un amor genuino y verdadero llega un punto en que se impregna con todos los matices de un estado de limerencia exacerbado...
Eso fue lo que me dejó pensando mucho y hasta ahora... En el mundo real existen personas que experimentan algo como eso y en la charla que tuve con quien comenté la película, ambas coincidimos en que esa frontera entre el amor y la obsesión es lo que provoca que alguien pueda volverse esclavo de su propio pasado y quedarse atorado ahí por el resto de su vida... Suena fuerte, pero creo que si puede pasar...
Eso era a grandes rasgos lo que quería plasmar en este escrito... ¿En qué momento se puede cruzar esa delgada línea que delimita ambas fronteras?... Con o sin película, en el presente o el futuro, la mente humana es un universo tan complejo, y me imagino que cada quien en base a su experiencia tendrá su propia opinión.
Hasta aquí el post de hoy.
P.D: Algo que no puedo dejar pasar ni de mencionar: ¡Grande Marina de Tavira en esta película!, cada vez más actores y directores mexicanos en Hollywood 😁💗.
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